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En psicología y salud, el efecto placebo hace referencia a al estado de bienestar que experimenta una persona cuando recibe un tratamiento para aliviar las molestias que pueda tener. Como sabes, en el campo de la medicina convencional, el placebo es una sustancia inocua que se administra para observar si su efecto es similar al de un medicamento. Los controles con efecto placebo se realizan, mediante estudios científicos, sobre personas que padecen una dolencia concreta: a unas se les administra un placebo, y a otras el medicamento elegido. Se trata, pues, de sustancias que no tienen una influencia directa en el dolor, enfermedad o molestia que es objeto de tratamiento, pero que pueden producir un efecto bienestar.
¿Para qué se usa un placebo?
A menudo, el efecto placebo es capaz de aliviar los síntomas de un malestar concreto, es decir, cumple su objetivo terapéutico. No es lo que se toma verdaderamente lo que produce esa mejoría; es la mente del paciente, condicionada por sus vivencias previas, la que permite experimentar al cuerpo esa sensación de mejoría. Por razones que se desconocen y por la complejidad que tiene la relación cuerpo y mente, se establece un efecto de causa y efecto entre dicha medicina y el resultado.
Utilidad de un placebo al integrar psicología y salud
Son las altas expectativas que ponemos en un tratamiento concreto las que nos hacen experimentar el efecto placebo. La fe que un paciente tiene en el profesional que le trata también puede ser un factor definitivo para que el tratamiento funcione. Se establece un vínculo de confianza con el experto y sus conocimientos, que se convierten en referencia vital para él.
Existe constancia de este hecho desde hace muchos años: un estudio elaborado por Henry K. Beecher en 1955 llegó a la conclusión de que el efecto placebo se produce en un 35 % de las personas. Su primera experiencia se produjo operando a un soldado en la II Guerra Mundial con una solución salina, en vez de morfina, pues ésta se había terminado. También se han comprobado fehacientemente sus efectos en dolencias como el asma.
El efecto placebo en las terapias alternativas
Nosotros vamos a centrarnos en el efecto placebo en psicología y salud, en concreto, en el campo de las terapias alternativas y la medicina natural, donde se asientan disciplinas como la acupuntura, naturopatía, masaje terapéutico, flores de Bach y homeopatía. Cierto es que su base científica no es la propia de la medicina convencional. Pero estos tratamientos a menudo son complementarios, e incluso muchos profesionales de la salud los recomiendan.
La razón es sencilla: el efecto placebo se basa en la estrecha relación entre psicología y salud, ya que ambas son realidades entrelazadas.
Las terapias alternativas tratan al ser humano desde un punto de vista holístico. Es decir, salud y bienestar son considerados como un concepto integral en el que no sólo interviene tu estado físico, sino también tus emociones, pensamientos y sentimientos. La medicina alternativa tiene como principal ventaja que observa al paciente en su totalidad.
El efecto placebo también tiene mucho que ver con el poder de la sugestión, que es capaz de mejorar tu nivel de relajación física y mental, porque confías en la seguridad de un tratamiento, en el profesional que lo controla o aplica y, en definitiva, en tu propia experiencia de vida. Como muchos de nuestros pacientes nos mencionan, la medicina convencional se centra demasiado en la parte física del paciente, mientras que la medicina natural trata a la persona de un modo integral y unitario.
Nuestra aproximación terapéutica en Art Thai Massage
En nuestra consulta de masaje tailandés , comprobamos a diario lo beneficioso que es para el buen resultado de un tratamiento conocer todo lo que rodea a la vivencia del paciente. Y cómo funcionan de forma entrelazada, como un todo, una serie de factores, entre los que se cuentan las expectativas en la terapia, la atención personalizada por parte del profesional, la comunicación asertiva y las creencias personales.
