El masaje tailandés y el yoga con frecuencia suelen relacionarse, algo que no nos extraña, pues ambas disciplinas tienen mucho en común. ¿Sabías que las posturas y estiramientos de yoga pasivo son utilizadas en el masaje tailandés? Ambas disciplinas trabajan nuestro cuerpo de manera física, mental y espiritual, mejorando así, el equilibrio entre nuestra mente y nuestro cuerpo. En este artículo vamos a poder conocer los aspectos que unen el masaje tradicional tailandés con el yoga, ambas prácticas con un gran número de seguidores que no dejan de crecer y que incorporan ambas disciplinas a sus rutinas diarias.
El masaje tailandés y el Yoga tienen el mismo origen
El masaje tailandés y el yoga constituyen antiguas artes curativas orientales. Se cree que el masaje tradicional tailandés tiene su origen en el norte de la India, donde fue fundado por un doctor de la India llamado Jivaka Kumarbacha, el cual también fue considerado como un yogi contemporáneo de Buddha. Este masaje fue difundido desde el norte de la India hasta llegar a Tailandia e incorporó desde el principio influencias del yoga.
Principios energéticos y espiritualidad
Ambas disciplinas trabajan con principios energéticos. Dicha energía es conocida como “lom” en Tailandia y corresponde al “prana” en la tradición del yoga, la misma puede ser mapeada y localizada.
Si algo es evidente, es que el masaje tailandés y el yoga, trabajan el cuerpo de forma física y mental, y es en este punto donde ambas pueden ser practicadas como un régimen de ejercicio o como una práctica espiritual. El propósito del yoga es activar la energía en el cuerpo para poder acceder a niveles superiores de conciencia. De forma similar, el objetivo del masaje tailandés no es solamente el estiramiento de los músculos sino facilitar el flujo de la energía vital a través del cuerpo para permitir que la curación se manifieste en el mismo.
Disciplinas demandadas con materiales similares
Tanto el yoga como el masaje tailandés han pasado de ser terapias prácticamente desconocidas, a adquirir una gran popularidad entre las personas de todas las edades. El yoga ha venido para quedarse y el masaje tailandés cada vez es más demandado en los centros de masajes, es por ello que actualmente estas disciplinas que han pasado inadvertidas durante mucho tiempo, ven ahora su momento de auge.
Y para aquellos profesionales con conocimientos en ambas técnicas, supone toda una ventaja, el hecho de que en ambas disciplinas se utilizan materiales similares, entre ellos los props, las almohadas, los cojines y otros materiales similares para ayudar a realizar los estiramientos sin que sufran las articulaciones.
Relajación, respiración y beneficios similares
El masaje tailandés y el yoga son disciplinas que tienen como objetivo mejorar nuestra salud física y mental, por ello, es imprescindible que en ambas disciplinas hagamos uso de nuestra respiración y nos relajemos, de forma que podamos vivir la experiencia en su grado más alto.
La combinación de presiones, movilizaciones pasivas y estiramientos del masaje tailandés son capaces de combatir la rigidez y recuperar el tono muscular, además, permiten prevenir lesiones, tienen función detox y ayudan a oxigenar los músculos. Tanto el masaje tailandés como el yoga, trabajan la relajación del cuerpo, eliminando bloqueos que causan tensión, nervios, etc., permiten una relajación total de los músculos y una eliminación de las energías negativas que enferman. Ambas disciplinas mejoran la flexibilidad de nuestro cuerpo, facilitan la amplitud muscular y la correcta ejecución de ejercicios o posturas.